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Administrando mis expectativas
Veamos estas 2 historias: 1 Reyes 18:20 El profeta Elías y dijo: Jehová Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, sea hoy manifiesto que tú eres Dios en Israel, y que yo soy tu siervo, y que por mandato tuyo he hecho todas estas cosas. Respóndeme, Jehová, respóndeme, para que conozca este pueblo que tú, oh Jehová, eres el Dios, y que tú vuelves a ti el corazón de ellos. Entonces cayó fuego de Jehová, y consumió el holocausto, la leña, las piedras y el polvo, y aun lamió el agua que estaba en la zanja. Viéndolo todo el pueblo, se postraron y dijeron: ¡Jehová es el Dios, Jehová es el Dios! 1 Reyes 19:3 Elías tuvo miedo y huyó para salvar su vida. Se fue a Beerseba, una ciudad de Judá, y dejó allí a su sirviente. Luego siguió solo todo el día hasta llegar al desierto. Se sentó bajo un solitario árbol de retama y pidió morirse: «Basta ya, SEÑOR; quítame la vida, porque no soy mejor que mis antepasados que ya murieron».
¿Puedes creer que ambas historias son de la misma persona? y no estamos hablando de que ocurrieron en periodos distintos de su vida, ambas ocurrieron en menos de 1 semana. Este es un claro ejemplo de nuestra humanidad. Es natural en nuestro viaje por esta vida esperar altos y bajos, no está mal sentirse angustiado o triste, pero no está bien permanecer ahí por mucho tiempo. Debemos saber que cuando estamos en nuestro punto más alto, estamos más cerca de experimentar un descenso emocional, para así poder administrar nuestras expectativas. Entre más alto nos encontramos, más vulnerables estamos a recibir críticas o enfrentar procesos negativos que si no sabemos manejar emocionalmente nos llevarán en un viaje en descenso sin control. No es cierto que vivimos de "victoria en victoria". Es natural tener complicaciones, pero eso no nos condiciona para un mal final, a menos que nosotros mismos lo permitamos. Se requiere tomar una decisión consciente. El Espíritu Santo desea ayudarte, Él quiere devolverte la alegría de vivir, ¿Qué tal si lo buscas en oración y si le dices cuánto anhelas escucharlo? Reserva un espacio de tu día para adorarlo, dile algo que brote de tu corazón.