De pronto todavía hay veces que me encuentro cuestionándome: será que puedo hacer esto o quizás Dios se equivocó conmigo, será que Él puede hacer proezas a través de mí, tendré lo necesario, el manto creo que me queda muy grande… Antes de compartir una enseñanza ni les cuento todo lo que pasaba por mi mente: y si no es esto lo que Dios quiere que diga, salió este mensaje de mí o fue algo que el Espíritu Santo me dio, y si lo expongo mal, y si digo otras cosas que nada que ver, y si no se entiende… luego de compartir el mensaje los pensamientos son algo como: fatal, no te salió bien, no sé qué fue lo que dije, lo hiciste mal, no deberías volver a hacerlo (unos en primera persona otros en tercera, interesante no?). Y así con todas las áreas de mi vida: seré buena mamá, y si estoy arruinando a mis hijas porque soy muy permisiva u otras veces muy estricta, Señor te equivocaste, yo no debí ser mamá, te suena parecido? O qué tal en lo personal: quiero hacer esto pero, será que puedo de verdad tener un negocio algún día, no qué va, no tienes lo necesario, no tendrás los recursos, no cumplirás tus sueños, no, no y no. Mucho de esto es autosabotaje, otros pensamientos provienen del enemigo de todas las personas que intenta truncar el propósito, el mundo en el que vivimos tampoco ayuda porque te marca un estándar y ahí vamos como mensos o mensas a tratar de alcanzar algo que otras personas imponen, que otros seres humanos con los mismos o más problemas emocionales que nosotros definen. No, en serio! Es ilógico!!! Otro ejemplo: te dijeron algo en algún momento y te marcó porque lo creíste, no sé, te dijeron tonta, o tonto y aún hoy te crees insuficiente, pero si estudias bien el caso podrás razonar lo siguiente: una persona con mis mismas debilidades me insultó, una simple palabra está truncando mi desarrollo, una simple palabra salida de la boca de otro ser humano “defectuoso”, o sea hola! Todo esto solo quiere lastimarte, dañarte, incapacitarte, lo vas a permitir? Dime, por qué no te crees capaz, por qué tienes miedo, por qué piensas que no puedes lograrlo y te diré que vives en una cárcel de mentiras, creyendo cada pensamiento que intenta impedir tu crecimiento, tu desarrollo. Mentiras que te dijeron otras personas, mentiras que te impuso el mundo, mentiras que el enemigo te dicta, mentiras que decidiste creer y al creerlas les diste poder sobre ti. Personalmente me cansé, estoy asqueada de ellas y vivo alerta para que, cuando aparecen esos pensamientos inmediatamente les digo: mentira! Es mentira! Re direcciono hacia Dios y decido creer lo que Él me dice, lo que Su palabra me dice y salgo de esas cárceles de pensamientos nocivos que solo pretenden dañar lo que me ha sido dado. No quiero vivir más una vida ordinaria, pero lo extraordinario está al otro lado de esas rejas de la prisión de pensamientos que intentan dominar tu vida. Pero, todo eso se puede vencer y solo vas a necesitar, un poco de dominio propio, la fortaleza del Padre sobre tu vida, no temer, paz sobre ti y saber que Dios esta contigo, ah pero, un momento, según la Biblia todo eso son promesas y son tuyas hoy! O sea, tienes todo lo que necesitas! Así que, he aquí, te diré una verdad y espero que te haga libre de la cárcel de la mente nociva: todo pensamiento que intenta opacarte, destruirte, estancarte, incapacitarte, detenerte, ES MENTIRA! Y esa queridos lectores, es La VERDAD! Be free!!!