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  • 10 septiembre 2020
  • ¡No al camino fácil!

    La vida se compone de procesos. Todo lo que necesitas saber o hacer conlleva una serie de pasos para que puedas dominarlo o entenderlo. El embarazo, crecer, ir a la escuela, el noviazgo, la rutina del día a día, y mucho más. Desde lo simple como aprender a hacer un sándwich hasta lo complicado como aprender un idioma u otros, prácticamente todo se compone de procesos. Sin embargo resulta que vivimos en un mundo que cada vez se vuelve más práctico. Te doy algunos ejemplos: • El control remoto: ya no es necesario levantarnos, cambiar los canales y volvernos a acomodar. • Lavadora automática o secadora de ropa. • Los vehículos, los teléfonos, computadoras, horno de microondas y cámaras digitales. • Hoy, casi todo lo puedes hacer por una mega red virtual llamada internet y mediante un simple y cómodo clic.

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    Pero antes si querías comunicarte a distancia tenías que enviar cartas por correo, o si querías hacer una llamada tenías que salir de tu casa y caminar hasta la casetilla telefónica y esperar si es que había alguien, y si esa persona hablaba con su novia, echaba y echaba monedas y aquella espera parecía interminable (sé que las nuevas generaciones quizás ni se imaginan lo que estoy contando jajaja), hoy puedes calentar tu almuerzo en 60 segundos y no tienes que lavar toda tu ropa a mano, incluso, no necesitas salir de tu casa para comprar algo pues lo puedes hacer mediante páginas de internet. Es increíble cómo la vida ha cambiado, y por favor, no me malentiendas, estoy de acuerdo con todo esto que hace que tu existencia sea más sencilla, más práctica e incluso te ahorre tiempo, pero no es de extrañar que en la actualidad a las personas les cuesta mucho más hacerle frente a las situaciones difíciles de la vida, porque todo a nuestro alrededor quiere facilitarnos todo (valga la redundancia) y cuando hay que sacar el carácter, cuesta, porque muchos de los procesos que iban a desarrollar en nosotros esfuerzo, entrega, dedicación, perseverancia y mucho más, fueron reemplazados por nuevas y mejores tecnologías que te ahorran ese esfuerzo. Por ello creo que vemos tanta gente con ansiedad, depresión, ataques de pánico (obvio hablo en forma general, esto no aplica en todo o en todos) y muchos otros padecimientos. Qué te quiero decir con esto? Que botes el control remoto? Que no compres lavadora automática? Que no uses internet? No! Solo creo que debemos ser intencionales en tener disciplinas que nos demanden esfuerzo, que no lo evitemos, que no vayamos por la vida buscando el camino fácil, que busques desafíos y te comprometas a vencerlos para que desarrolles el carácter que te va a servir para hacerle frente a esta vida que ya de todas formas te va a retar cuando menos lo esperes. Cuáles son tus debilidades? Fortalécelas! Véncelas una por una. Desafíate! Acostúmbrate a dar todo de ti cada día. Cánsate, porque el descanso es súper rico solo cuando sabes que lo mereces. Desgástate por aquello que sueñas, que cuando te vayas de este mundo no te lleves nada porque todo lo entregaste. Mira cada proceso como una oportunidad para crecer y obtener herramientas que te ayuden en cada etapa de este gran viaje. Si la vida te reta, estás listo para hacerle frente? Prepárate porque hay cimas que te esperan!