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Mentiras y palomitas
Hace unos días vi con mi esposa la nueva película del Hombre Araña Lejos de casa mientras comíamos unas palomitas. ¡Qué mejor compañía! No fui al cine a verla porque como muchos de ustedes, después de la muerte de Tonny Stark apenas me estoy recuperando y hay cuerdas sensibles que no quiero tocar, ja ja ja. Una particularidad que he descubierto es cuando en múltiples ocasiones puedo escuchar la voz de Dios muy frecuentemente al ver una película. Tal vez esta situación fuera de lo común sea un problema para algunas personas más tradicionalistas… pero bueno, usted entiende… La verdad es que Dios me habla muchas veces a través de esta manera (cuando digo Dios me habla, indico la forma como siempre lo explico de que viene a mi mente un pensamiento tan bueno proveniente de Él porque no soy tan inteligente para meditar así, por eso digo “Dios me habló…”) Lo siento si no has visto la película, pero voy hacer un poco de spoiler, así que continúa leyendo o espera verla. Pero, la verdad si no has visto la película todavía no te perderás de mucho (en mi humilde opinión). Lo que llamó más mi atención de la película fue la forma en que el villano de la película (Misterio) actuaba, era muy diferente al típico enemigo con grandes súper poderes, casi imposible de vencer y que apenas lo ves aparecer en la película sabes que es el enemigo. Algo así como cuando en Los Vengadores apareció Tanos y con un golpe noqueó a Hulk y yo pensé: ¡Dios mío esto está complicado!
Pero la forma en que este villano trabajaba era muy diferente pues operaba a través de la mente y las ilusiones. Parecía tan amigable a primera impresión, pero en realidad era igual a todos lo que buscan poder y control sobre los demás. En ese momento fue donde pude pensar sobre la forma en que nuestro enemigo trabaja contra nosotros mientras nos muestra espejismos que no son reales para que los creamos, haciéndonos parecer que es una buena opción ser su amigo para depositar nuestra confianza en él. Cuántas personas caen en esa trampa, se dejan llevar por lo que sus ojos ven y sus sentidos sienten; pero la verdad es que son engañados, viven sus vidas creyendo mentiras y al final del camino se dan cuenta de la trampa entretejida para perder la pelea. Desde el principio este ha sido un asesino, y no se mantiene en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando miente, expresa su propia naturaleza, porque es un mentiroso. ¡Es el padre de la mentira! Juan 8:44 Cuáles son esas prácticas que te tienen atemorizado casi congelado, qué es lo que tus ojos están viendo que hace gritar a tu corazón aprisionado sintiendo que ya todo se acabó y no hay salida. No será que estás creyendo una mentira y te estás dejando llevar por ella, por que la palabra nos enseña que si Dios está con nosotros NO HAY NADIE contra nosotros. Mi intención es simple, decirte que no te dejes engañar pues tu mente es un campo de batalla, entiéndelo y protégela por medio de la fe y la palabra de Dios. Termino diciéndote que tú y yo no tenemos sentido arácnido, pero tenemos a alguien mejor y es el Espíritu Santo que como nuestro consolador nos guiará a toda verdad. Confía en Él más que en todo lo que tus ojos vean y estoy seguro que podrás terminar como vencedor sin importar lo que enfrentes….